Cuando habla de sus hijos, a Leo Messi le cambia esa cara de pasmarote –con el susto en los ojos- que le quedó desde que Dembélé malogró el 4-0 ante el Liverpool. Justo un mes después, el mejor de todos los tiempos vuelve a sonreír.
Y lo hace hablando de su hijo mediano, Mateo , en una tele argentina. Ya en su día, cuatro años atrás, Messi nos enterneció contando que Thiago , el mayor de sus hijos, cuando le veía salir de casa para ir a jugar un partido le soltaba “¿Papá, otra vez te vas al gol?”. Cuanta sabiduría en la inocencia de la pregunta. Por lo que contó el propio Leo, lo de Mateo chinchado a su hermano Thiago celebrando los goles del Madrid, tiene esa divertida picardía de los niños listos. Lejos de la rivalidad insana entre clubs, la forma de desafiar al padre y de picar al hermano es, cuando menos, socarrona. En una casa de culés acérrimos, su manera de chinchar y de llamar la atención pasa por provocar.
Eso sí, si Mateo quiere celebrar los goles del Madrid, en este último año no ha tenido suerte. Tan sólo 63 en Liga es el peor registro desde que hay Ligas de 20 equipos. A ver si entre Hazard , Jovic y Mariano, el próximo año habrá más lio en casa de Leo . Difícilmente seguirá tanta sequía.