SAN SALVADOR.- La Misión Dominicana en El Salvador, encabezada por el embajador Fernando Pérez Memén, auspició una misa en honor a la Virgen de la Altagracia, madre espiritual del pueblo dominicano.
La eucaristía fue oficiada por el nuncio Rocco Gangemi, quien expresó que “como madre espiritual de los dominicanos, la Virgen nos mira como siempre mira, con compasión a su hijo en su regazo”.
La homilía se llevó a cabo en la Iglesia de La Nunciatura Apostólica, en la cual Pérez Memén tuvo las palabras de agradecimientos para el Nuncio Gangemi y todos los presentes.
“Nosotros en la Misión Dominicana en El Salvador, que nos ha acogido con alegría y beneplácito, rendimos tributo en oración y devoción a nuestra Madre espiritual, la Virgen de la Altagracia, a quien advocamos y referenciamos respetuosamente por todo lo que ha concedido al pueblo dominicano en los momentos de esplendor, pero también en los tiempos más difíciles, cubriéndonos con su Santo Manto”.