Brasil toma medidas para enfrentar crisis económica
BRASIL.- El Banco Central de Brasil redujo este miércoles, en una decisión unánime de su Comité de Política Económica y por primera vez en 16 meses, la tasa básica de interés del país, que pasó del 6,5 % al 6,0 % anual, el menor nivel desde 1986 y con el que busca ayudar a reactivar la economía del país.
De acuerdo con el Comité de Política Monetaria (Copom), que establece las directrices de la política monetaria en Brasil, la decisión se tomó con base en las proyecciones que prevén que la economía del país finalmente comenzará a recuperarse tras la grave recesión de 2015 y 2016.
“Indicadores recientes de la actividad económica sugieren la posibilidad de que se reanude el proceso de recuperación de la economía brasileña”, señaló el Copom en el comunicado divulgado este miércoles.
No obstante, el Comité aclara que esa recuperación será gradual.
La reducción de los tipos a mínimos históricos puede incentivar tanto el consumo como las inversiones de las empresas, e impulsar el crecimiento del país.
Brasil viene en una lenta recuperación económica luego de la fuerte recesión que sufrió entre 2015 y 2016, cuando encadenó una caída de casi 7 puntos porcentuales de su producto interior bruto (PIB).
El PIB brasileño creció un 1,1 % en 2017 y el mismo porcentaje en 2018, mientras que para este año los expertos del mercado financiero prevén un avance de menos del 1 %.
De acuerdo con el Banco Central, aunque el escenario externo se muestra benigno, existen riesgos asociados a una desaceleración de la economía global.
El Banco Central no teme que la reducción de la tasa básica de intereses pueda provocar una subida de la inflación en Brasil.
Según las proyecciones del Copom, la inflación del país se mantendrá en niveles cómodos, por lo que mantuvo prácticamente estables las estimativas de inflación para los próximos años, variando únicamente la de 2020.
Así las cosas, la inflación estimada por el Banco Central para 2019 es de 3,8 %, la de 2020 de 3,9 %, la de 2021 de 3,75 % y la de 2022 de 3,50 %.
Aunque el Copom se muestra tranquilo con la inflación actual, la decisión de bajar los tipos a su nivel más bajo en 33 años, luego de una tasa de 6,5 % constante durante 16 meses consecutivos, busca ayudar a acelerar la economía del país.
Tras ser anunciada la medida, sindicatos e industriales dieron a conocer sus opiniones. Los primeros la criticaron y los segundos la aplaudieron.
Para la Força Sindical, segunda mayor central sindical de Brasil, la medida fue “tímida e insuficientes para impulsar la creación de empleo en Brasil“.
“Entendemos que, con esta reducción a cuentagotas, el Banco Central perdió una gran oportunidad para promover una reducción drástica en la tasa de interés básica, que podría actuar como un estímulo para la creación de nuevos empleos y para el aumento de la producción en el país. Una vez más, el Banco Central frustra los anhelos de los trabajadores”, señaló la central obrera en un comunicado.
En el lado opuesto se manifestó la Confederación Nacional de la Industria (CNI), que aplaudió la decisión del Copom.
El presidente de la Confederación, Robson Braga de Andrade, señaló en un comunicado que la medida promoverá las inversiones y el consumo por parte de los brasileños, lo que ayudará a reactivar la economía del país.
“El débil desempeño de la actividad, la baja inflación y el movimiento global de corte en los tipos, especialmente en los países emergentes, justifican la decisión del Banco Central“, señaló el presidente de la CNI, citado en el comunicado.