Corea del Norte dispara «proyectiles no identificados» frente a su costa oriental
a Cancillería norcoreana denuncia que EE.UU. y Corea del Sur carecen de «voluntad política» para seguir adelante con las conversaciones y tacha de «violación flagrante» sus juegos de guerra conjuntos.
Corea del Norte ha disparado este martes proyectiles no identificados frente a su costa oriental, lo que eleva a cuarto los lanzamientos efectuados en menos de dos semanas, informó el Ejército de Corea del Sur.
Según el Estado Mayor Conjunto surcoreano, los proyectiles fueron disparados dos veces la mañana de este martes desde la provincia norcoreana de Hwanghae del Sur.
«Nuestro Ejército está monitoreando la situación en caso de lanzamientos adicionales y se mantiene en alerta«, declaró el Estado Mayor Conjunto, informa Yonhap.
Por su parte, una fuente gubernamental estadounidense ha señalado en declaraciones a Yonhap que Washington «continúa monitoreando la situación» y mantiene «estrechas consultas» con sus aliados surcoreanos y japoneses.
«Violación flagrante» de los acuerdos
Entretanto, el Ministerio de Exteriores de Corea del Norte ha condenado este martes los ejercicios militares conjuntos de EE.UU. y Corea del Sur, que calificó de «abierto desprecio y violación flagrante» de los acuerdos alcanzados para mejorar las relaciones entre Pionyang y Washington y garantizar la paz duradera en la península coreana.
Este tipo de acciones «agresivas» demuestran que las autoridades estadounidenses y surcoreanas «no tienen la voluntad política» para llevar a efecto las declaraciones conjuntas, y que mantienen su posición de «continuar enfrentándonos como enemigos», se lamentó un vocero de la Cancillería, citado por la agencia KCNA.
Aunque Pionyang sigue dispuesto a «resolver los problemas a través del diálogo», la situación actual «está reduciendo drásticamente» su deseo de cumplir los acuerdos con EE.UU. y Corea del Sur, lo que también «afecta a la posibilidad» de conversaciones futuras, asegura el portavoz. En este sentido, advierte que su país se verá «obligado a buscar un nuevo camino» si Seúl y Washington «afilan una espada» para dañar al Norte.