El FBI allana la isla caribeña de Jeffrey Epstein poco después de su aparente suicidio en la cárcel
El multimillonario, acusado de tráfico sexual de menores, fue encontrado muerto en su celda el sábado pasado.
Agentes del FBI allanaron la isla Little St. James, propiedad del difunto financiero Jeffrey Epstein, dos días después de que el millonario aparentemente se suicidara en una cárcel de Nueva York. Un grupo de turistas que se encontraban en un barco alquilado frente a la costa de la isla vio a los uniformados este lunes y tomó imágenes de la redada.
«Estábamos disfrutando del almuerzo cuando vimos a más de una docena de personas bajando de sus lanchas rápidas y desembarcando en la isla. Cuando miramos más atentamente, pudimos ver el logotipo del FBI en la parte posterior de sus camisas. No tardamos mucho en entender que debían de estar llevando a cabo una redada en la casa de Epstein», dijo al diario The Daily Mail un testigo anónimo que obtuvo las imágenes.
La isla, que forma parte de las islas Vírgenes Estadounidenses y fue comprada por el multimillonario hace 20 años, supuestamente fue escenario de las fiestas sexuales con menores de edad con la participación de invitados ricos y poderosos que Epstein organizó durante años.
Jeffrey Epstein fue encontrado muerto en su celda en la Unidad Especial de Vivienda (SHU, por sus siglas en inglés) del Centro Correccional Metropolitano de Nueva York el sábado pasado. Su aparente suicidio generó inmediatamente acusaciones de negligencia en la prisión e incluso asesinato, dados los escasos y confusos datos disponibles. El FBI está investigando su muerte como «aparente suicidio».
El magnate, de 66 años, había estado recluido en la prisión desde su arresto el mes pasado. Se declaró inocente de los cargos de tráfico de menores y de conspiración, que conllevan una pena de hasta 45 años de prisión.