Descubre los mitos falsos sobre la domótica y las casas inteligentes
La domótica ha llegado para quedarse. En nuestro país, y más en el continente americano y en el europeo, las casas inteligentes se están imponiendo con relativa solvencia a las analógicas debido a las garantías de seguridad, ahorro y eficiencia energética que proporcionan.
Debido a esta subida de su comercialización, muchos son los mitos falsos que se han ido difundiendo sobre estos sistemas tecnológicos.
¿Qué es la domótica?
La domótica se define como el sistema tecnológico capaz de automatizar los procesos de varios dispositivos conectados a la red. El mejor ejemplo para entenderla es Alexa, el dispositivo que permite a partir de señales de voz ordenar tareas a otros aparatos.
Todos los electrodomésticos o utensilios domóticos disponen de una serie de sensores que permiten la comunicación y el traspaso de información desde el panel central domótico o cualquier otro dispositivo con conexión a Internet. De ahí que los expertos afirmen que domótica y wifi forman un tándem inseparable.
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¿Cuáles son los falsos mitos sobre la domótica?
Como en muchos otros aspectos relacionados con la innovación y la evolución tecnológica, siempre surgen detractores que se dedican a descalificar los avances. La domótica también ha pasado por este proceso, de ahí que se hayan difundido ciertos mitos completamente erróneos sobre sus propiedades y características:
1- La domótica es muy cara
No es del todo correcto, todo depende del tipo de vivienda y de la instalación domótica que requieras. Muchas empresas ya están lanzando grandes ofertas para convertir tu casa en un hogar inteligente. De la misma manera, la inversión se amortiza pasados de dos a tres años debido al ahorro energético que conlleva su uso.
2- No se ahorra tanto en luz
Completamente mentira. Estudiosos en la materia han llegado a la conclusión de que con una instalación domótica puedes ahorrar hasta un 25% en la factura de la luz, además de que la potencia recomendada será menos elevada.
3- Requiere de mucho mantenimiento
También es una afirmación errónea. Todos los sistemas de domótica requieren de un mantenimiento similar al de cualquier otro electrodoméstico del hogar. Por supuesto, sí que tienes que tener en cuenta las normas de uso para alargar su vida útil.
4- Son sistemas muy complejos
Totalmente falso. Los sistemas domóticos disponen de una interfaz muy sencilla que permiten automatizar procesos a personas que no están muy familiarizadas con los aparatos tecnológicos (tercera edad). Por ejemplo, una persona dependiente puede disponer de un botón de emergencia conectado a la Central Receptora. Solo con pulsarlo, dicha central ya recibirá el aviso.
5- Es necesario hacer muchas reformas
Instalar elementos domóticos no implica que cambies toda la distribución de la casa, tires paredes y techos o directamente tengas que hacer una reforma integral. De hecho, muchos de ellos, como por ejemplo el roomba, se pueden guardar directamente en un armario.
Lo mismo sucede con el cableado. No es necesario cambiarlo por completo dado que muchos aparatos inteligentes son inalámbricos.
6- Si uno se estropea, se estropean todos
Es cierto que los sistemas domóticos van conectados a un panel domótico central, pero su funcionamiento es completamente independiente.
Todos ellos disponen de sensores individuales para facilitar la comunicación y el traspaso de información. De esta forma, si por ejemplo se estropea el sistema automatizado de subida y bajada de persianas no tiene por qué influir en nada en el resto.
7- La domótica es fácil de hackear
Mentira, la domótica dispone de medidas de protección perfectamente estudiadas para evitar la entrada de malhechores informáticos. De hecho, una de sus máximas es mejorar la seguridad en el hogar. Una muestra de ello son las alarmas, cámaras de vigilancia y cerraduras inteligentes disponibles en el mercado.