El presidente Medina planteó un futuro de oportunidades y seguridad, con las mejores condiciones de vida, paz y armonía, solo se logra “si elegimos seguir construyendo sobre todo lo logrado y si podemos tener debates constructivos”.
“¿Responderemos a los retos que vienen con miedo, replegándonos, enfrentándonos unos a otros? ¿Responderemos cerrando iniciativas como los centros CAID? ¿Dejando morir instituciones de excelencia, como el 911? ¿Responderemos despojando a la gente de derechos que ya son suyos?” “O, por el contrario, ¿enfrentaremos el futuro con confianza, orgullosos de todo lo que hemos logrado, de los valores que representamos y seguros de poder llegar aún más lejos?”.
Pueblo decidirá sabiamente
A estas preguntas, el presidente Danilo Medina respondió que no cabe duda que el pueblo dominicano decidirá sabiamente y sabrá defender lo que es suyo.
“Cualquiera que sea su decisión, lo cierto es que el próximo 16 de agosto el país tendrá un nuevo presidente, el que haya elegido democráticamente la ciudadanía en las urnas”.
“Y lo cierto también es que, sea quien sea ese nuevo presidente y sean quienes sean sus funcionarios, el país que se encontrarán no será el mismo que nos encontramos nosotros en 2012”.
Dijo que un nuevo Gobierno, se encontrará con niveles de pobreza, de desnutrición, de desempleo, de analfabetismo y de mortalidad materno infantil más bajos que se han tenido en la historia del país.
Precisó que las próximas autoridades encontrarán escuelas llenas, carreteras seguras que unen todo el país, un campo que bate récords de producción y hospitales dignos de cualquier país desarrollado.
Economía sólida y diversa
Igualmente, recibirán un país más próspero, con una economía sólida y diversa, donde la protagonista es una nueva clase media consolidada y empoderada.
“Se encontrarán un Estado más institucionalizado, más moderno, con unas cuentas públicas más equilibradas, transparentes y con mayor capacidad de respuesta a las necesidades de los ciudadanos”.
País ejemplo en toda la región
Valoró que en los últimos años se ha producido una revolución que solo es posible cuando las expectativas de la gente y las prioridades de su gobierno se alinean y no se separan. “Y así debe seguir siendo, porque no podemos dar marcha atrás”.
Afirmó que esta revolución ha permitido que los hijos de un hogar humilde reciban buena educación y que sus padres tengan salarios dignos y que nuestros productores tengan acceso al crédito y que el crecimiento económico llegue a todos los sectores sociales.
Asimismo, que los adultos mayores tengan pensiones, que la salud de calidad llegue a todos y que los derechos sigan ampliándose, que ante una emergencia o una enfermedad los ciudadanos pueden contar con el Estado, que las mujeres sigan abriéndose espacios en nuestra sociedad y tengan garantizados los mismos derechos que los hombres.
Del mismo modo, que la República Dominicana sea un país próspero de clases medias y un ejemplo para toda la región.
“Eso ya no puede tener vuelta atrás. ¿Y por qué digo que este cambio ya no tiene vuelta atrás? Porque todo esto no es solo iniciativa de un presidente, ni de un gobierno. Este cambio le pertenece ya a todos los dominicanos y dominicanas”.
“¡Cada avance es una conquista histórica del pueblo dominicano! Es parte de nuestro patrimonio irrenunciable como nación y es nuestro deber como ciudadanos garantizar que sigamos en esta senda de progreso!”