OJO: ¿Cómo se contagia Escherichia coli en orina?
La Escherichia coli es un bacilo gramnegativo perteneciente a las enterobacterias. La vía de transmisión ascendente es la manera más frecuente que explica cómo se contagia la E coli en orina.
Este trabajo se ve facilitado ya que la bacteria posee mecanismos de infección que fácilmente destruyen las barreras de protección, generando una infección urinaria.
En el siguiente artículo conoce como se contagia la Escherichia coli en orina, como se manifiesta la infección de vías urinarias y su tratamiento
índice del artículo
La Escherichia coli
Antes de conocer cómo se contagia la Escherichia coli en orina, debemos tener en cuenta que esta es una bacteria gramnegativa (denominada así por sus características al microscopio bajo la tinción de gram).
La Escherichia coli se encuentra la familia de las enterobacterias. Tiene forma de bacilo (ovoide) y se encuentra en condiciones normales en el intestino, sin producir enfermedad.
Las bacterias cuentan con determinadas características en su forma y los residuos que producen, que le confieren facultades infecciosas. La Escherichia coli ha sido una de las más estudiadas en este aspecto.
Dentro del grupo de las E coli, existen 3 subdivisiones:
- Comensales: no producen infección a nivel intestinal, sin embargo, a fuera del intestino pueden producirla si existen factores que lo favorezcan.
- Patógenos intestinales: Producen infecciones a nivel gastrointestinal, causando diarrea. No forman parte de la flora intestinal normal
- Extraintestinales: son aquellas que son capaces de producir infección en otros sistemas, mas no en el digestivo. En este grupo se encuentran las uropatogenas.
Características de la Escherichia Coli
Existen varias características que nos explican cómo se contagia la Escherichia coli en orina, propias de la bacteria.
En primer lugar, cuentan con mecanismos en su superficie que les permite adherirse e invadir los tejidos. Se encuentran moléculas como los Pili y las fimbrias, que el aparato digestivo permiten la adhesión e invasión intracelular de la bacteria. Además, inducen una respuesta inflamatoria local y forman una biopelicula que favorece su desarrollo.
El otro mecanismo de virulencia se basa en las toxinas producidas por la Escherichia coli. Estas son sustancias que surtirán efecto a nivel local para favorecer el crecimiento de las bacterias. Entre ellas encontramos las hemolisinas, la aerobactina, el factor citotóxico necrosante de tipo 1 y la toxina secretada autotransportadora
La hemolisina destruye los globulos rojos, liberando hierro y nutrientes que favorecen el crecimiento bacteriano, la aerobactina proporciona hierro a la E. coli, el factor citotóxico necrosante de tipo 1 destruye las células de la vejiga y la toxina secretada autotransportadora favorece la proliferación bacteriana intracelular y destruye las células de los riñones y la vejiga.
Una vez que la bacteria se adhiere, inicia la destrucción de las células de la vejiga y riñones, a fin de aumentar la disponibilidad de hierro y nutrirse de este. Además produce el antígeno K, que inhibe los mecanismos del sistema inmunológico para proteger al organismo de la bacteria.
De esta manera la Escherichia coli logra invadir y proliferar en las vías urinarias, produciendo una infección urinaria.
¿Cómo se contagia la Escherichia coli en orina?
La primera respuesta que les daré a la pregunta de cómo se contagia la Escherichia coli en orina es simple, pero clave: cómo llegó allí.
El contagio de la Escherichia coli en orina ocurre básicamente mediante 3 vías:
- Ascendente: Se denomina así al paso de bacterias del tracto digestivo y de la zona perineal hacia el aparato urinario
- Contigüidad: Debido a bacterias cercanas en la zona, como por ejemplo, por sondas vesicales, manipulación con guantes u objetos contaminados.
- Hematógena: La bacteria se encuentra en otro sistema produciendo infección, y a través de la sangre viaja, alcanzando la via urinaria e infectándola.
Una vez llegada la bacteria a la vía urinaria, como fue mencionado previamente, inicia con los mecanismos de adherencia e invasión propios de la Escherichia coli.
Barreras de protección de las vias urinarias
Así como las bacterias cuentan con mecanismos de virulencia, las vías urinarias cuentan con mecanismos de defensa, que deben estar alterados para que se produzca la infección urinaria.
En primer lugar, el vaciamiento vesical constante evita que las bacterias que no se han adherido proliferen y produzcan infección, esto se modifica en las personas con obstrucción por cálculos en los riñones, hiperplasia prostática benigna, o retención urinaria por otras causas.
Por otra parte, la anatomía de la vía urinaria está diseñada para que el flujo de esta sea descendente, y evitar así el ascenso de infecciones. De manera que alteraciones anatómicas, como el reflujo vesicoureteral favorecen las infecciones urinarias. De la misma manera, los genitales masculinos y femeninos cuentan con pH ácidos, que evitan la colonización perineal de gérmenes que pueden producir infecciones.
Por último, la orina posee ciertas características que confieren protección a la via urinaria, como pH acido, alto contenido de urea, la proteína de Tamm Horsfall que inhibe la adherencia de los pili de la E. coli, y una alta osmolaridad.
Infecciones urinarias por Escherichia coli
Se considera que el 80% de las infecciones urinarias se deben a este germen. La cercanía del aparato genital con el tracto urinario explican cómo se contagia la Escherichia coli en orina.
De manera que inicialmente, una cistitis o uretritis es el punto inicial de la infección lo que se conoce como una infección urinaria baja. De no ser tratada, asciende al resto de la via urinaria, progresando a una infección del tracto urinario alto.
La infección urinaria baja por Escherichia coli en orina se caracteriza por cursar con ardor al orinar, sensación de falta de vaciamiento de la vejiga, disminución del volumen urinario debido al dolor, y dolor por encima del pubis.
En las infecciones urinarias altas, a diferencia de las bajas, existen síntomas de afección del estado general, como fiebre, nauseas, vómitos, dolor abdominal, dolor de cabeza y sangrado al orinar.
Tratamiento de infecciones urinarias por Escherichia coli
El tratamiento ideal para las infecciones urinarias para Escherichia coli dependerá del resultado del urocultivo.
El urocultivo es un estudio en el cual se determina que cantidad de bacterias hay en la orina (valor expresado en unidades formadoras de colonia o UFC) y la sensibilidad o resistencia a los antibióticos de uso común.
Sin embargo, en la mayoría de los casos es necesario instaurar un tratamiento antibiótico empírico, ya que los resultados del urocultivo demoran entre 72 horas a 1 semana.
Los antibióticos de elección pertenecen al grupo de las quinolonas como la ciprofloxacina o levofloxacina, las cefalosporinas, como el ceftibuten. La respuesta terapéutica es muy buena en el uso de amigoglicosidos como la amikacina, y con el trimetoprim sulfametoxazol, sin embargo, debido a altas tasas de resistencia se ha utilizado más las primeras opciones.
De manera adicional, el manejo sintomático con analgésicos como la dipirona o el diclofenaco, la buscapina para disminuir los espasmos de las vías urinarias y el flavoxate como dilatador de vías urinarias, ayudan con los síntomas de disuria y dolor abdominal.
El tratamiento definitivo se instaura por el urocultivo, y la duración del mismo varia de 5 a 7 días.
Las cistitis no complicadas pueden solo requerir tratamiento de 3 a 5 días, obteniendo una respuesta satisfactoria.